Lo he dicho muchas veces, pero no me canso: la tarta de queso con horno es una maravilla, porque se mezclan todos los ingredientes juntos, se vierten en el molde y se lleva al horno. ¡Y poco más! Luego, le añades un poquito de gracia con una buena mermelada casera y muchos frutos y frutas de temporada por encima y consigues un dulce que es una delicia, además de precioso a la vista.
¿Te animas a hacer esta tarta de queso y frutos del bosque?
Frutos del bosque
Yo he decidido añadir una mermelada de fresa casera, hecha a mi gusto, es decir, con una cantidad de azúcar menor de lo que se estila, pero que a nosotros, en casa, nos gusta más, porque sabe mucho a fresa y tiene muchos trozos. Por encima, añadí fresones y arándanos cultivados en mi isla, Gran Canaria. ¿Sabías que aquí se cultiva y recolecta el arándano de diciembre a abril, cuando en el resto de Europa esto no es posible por las temperaturas mucho más frías? ¡Con lo que me gustan los arándanos!
Si prefieres otros frutos o frutas, como las frambuesas o cerezas, no hay problema. Busca una mermelada que combine bien y hazla a tu gusto y según lo que tengas en la oferta local de tu lugar de residencia. Apuesta por productos de km 0, mucho más sabrosos, saludables y sostenibles para el territorio donde vives. Además, ayudarás a los productores de tu tierra. ¡Implícate en la economía circular!
Apuesta por productos de km 0, mucho más sabrosos, saludables y sostenibles para el territorio donde vives.
Se bate, se vierte en el molde y se hornea. ¡Y listo!
Ya sabes que yo soy de la cofradía de “solo lo fácil”. Por eso, esta tarta es una joya. Con lo rica que está y lo rápido que se prepara, ¡ni te lo pienses!
Para hacer este pastelito, solo tienes que mezclar todos los ingredientes, verterlos en un molde desmoldable, hornearla, dejarla enfriar, desmoldarla y ponerle por encima lo que más te guste o esté de temporada. Si esto no es sencillo, nada lo será.
Si te gustan las tartas de queso y eres como yo, que no te molan las que son de cuajar y llevan nata y tampoco quieres pegarte el día entero preparándola, te aseguro que este pastel sabroso y bonito es tu mejor opción.
Venga… ¡Vamos a hacer la tarta!
Tarta de queso y frutos del bosque
INGREDIENTES (8 raciones y un molde de 22-24 cm de diámetro)
- 400 g de queso crema
- 200 g de ricotta o requesón
- 5 huevos medianos
- 140 g de azúcar
- 30 g de harina de millo (maíz)
- 30 g de almendras molidas
- 1 cucharadita de pasta de vainilla pura
- fresas, arándanos y mermelada casera de fresas para adornar por encima
ELABORACIÓN
1º) Hacer la tarta. Bate el queso con el requesón y el azúcar. Incorpora los huevos de uno en uno, mientras bates. Añade la vainilla y, seguidamente, la harina y las almendras molidas. Mezcla bien y vierte en un molde desmoldable enmantequillado. Hornea a 190ºC durante 45 minutos. La tarta debe moverse un poco por el centro cuando apagues el horno y la saques de él, porque seguirá cociéndose y endureciéndose mientras se enfría.
2º) Adorna la tarta. Cuando la tarta esté completamente fría, añade una capa generosa de mermelada de fresas por encima. Coloca unas cuantas fresas sobre la tarta y rellena todos los huecos con arándanos. Lleva a la nevera hasta el momento de servir.
Ten en cuenta…
- Esta tarta puede hacerse con cualquier clase de fruta y mermelada. Cubierta de mermelada de naranjas amargas y con ruedeceitas de naranja confitada es una maravilla. Si tienes la suerte de acceder a moras silvestres de las ricas, ni te lo pienses.
- A mí me gusta usar requesón de cabra, pero, si lo prefieres, puedes añadir nata, leche, mascarpone, quesitos en porciones o incluso queso curado rallado.
- En vez de vainilla, puedes añadir ralladura de limón o de naranja.
- Hacer esta tarta, incluido el horneado, te llevará como mucho unos 70 minutos.
- Muy económica. Por menos de 10€ tienes una tarta increíble de 8-12 raciones bastante generosas. ¿Cómo se te queda el cuerpo?
¿Has visto qué corte tan apetitoso tiene? Pues te aseguro que está aún más rico al comértelo.
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Si te ha gustado esta receta…
Definitivamente estas tartas de queso sin masa solo con la parte cremosa son mis favoritas. Y lo mejor (además de sencilla) es que con una misma base te da para mil versiones según la época del año en que estamos.
Suerte tenéis con productos locales tan ricos y variados. Lo del km 0 en Barcelona no me pesaba pero aquí en París te digo que en marzo me apetece cualquier cosa que venga de más lejos jajaja
Un abrazo bien fuerte,
Palmira