


Largas tardes de verano
¡Qué lejos quedan esos quince años en los que no había nada más importante que estar con las amigas! Las largas tardes de verano se hacían cortas, hablando y riendo como pequeñas locas. El tiempo era algo que solo interesaba a los adultos, obsesionados con poner...
El reposo
Toda mi vida fue un no parar, una huida continua hacia delante como una cadena perpetua. A los cincuenta y tres años, ya no podía más. Se me atragantaban hasta los amables buenos días que me daba la conductora del tranvía en el que iba de casa a la oficina y de esta...
Entre pinos
Pinos. No se ve otra cosa que cientos de pinos alrededor. Miles probablemente. Es un paisaje que impresiona. Son muy altos y están tan juntos… Podría parecer agobiante, aunque el agobio es lo de menos en estos momentos. El cielo da la impresión de ser de color...
Quise volar
Si me hubiesen dicho dónde acabaría, me habría aferrado con uñas y dientes a mi insulsa realidad. Sin embargo, soñé y quise volar, ser libre. ¡Disfrutar de mi aventura! Echar a andar. Pataleé, me revolví y recé para que el viento soplase y a algún sitio me arrastrase....