¡Pues depende! Hay quien dice que un post debe ser corto para no aburrir al personal. Hay quien prefiere que sean tan largos que dejen definitivamente zanjado el tema del que tratan, por filosófico o enrevesado que sea. Hay quien prefiere la carne y quien gusta más del pescado. Sea como fuere y en mi humilde opinión, creo que hay gustos para todos y no hay una respuesta universal y de cajón para esta pregunta.

Antes que continuar, vamos a delimitar lo que se entiende por post largo o corto, sin ser estrictos, solo manejando valores aproximados.

[icon_list_item icon=’fa-book’ icon_type=’transparent’ icon_color=’#8f781b’ icon_top_gradient_background_color=” icon_border_color=’undefined’ title=” title_color=” title_size=”] Un post es largo cuando supera las 500-600 palabras y corto cuando está entre 200-500 palabras.

 

[icon_list_item icon=’fa-hand-o-right’ icon_type=’transparent’ icon_color=’#9e8729′ icon_top_gradient_background_color=” icon_border_color=’undefined’ title=” title_color=” title_size=”] ¿Son mejores las entradas cortas o las largas y con enjundia?

Hay de todo en la viña del señor. En unas ocasiones me he topado con posts muy largos, pero con un contenido tan sensacional que no he podido dejar de leerlos e incluso me los he guardado para releerlos y, en otras, un minipost me ha aclarado todas las dudas sobre el tema que trataban. En ambos casos, el autor ha hecho lo correcto, porque ha dotado a su post del contenido y la estructura acertados para atrapar el interés del lector y resolver sus inquietudes. Ahora bien, es más frecuente que me encuentre con posts que parecen redactados a medias, escritos con prisas para cumplir con la agenda de publicación (¡menuda estupidez!) o con información sisada o deliberadamente no reseñada (es como quienes ocultan datos de sus famosas recetas). También veo muchos posts largos y cansinos que no hacen más que repetir y repetir contenido como intentando hipnotizar al lector (“compra mi curso”, “porque lo mejor es comprar mi curso”, “venderás todas tus existencias si haces mi curso”, “no hay nada como mi curso”, “te voy a explicar por qué mi curso es el mejor”, “en mi curso lo aprenderás todo…” y bla, bla, bla…). No obstante, los unos y los otros son perfectamente lícitos, porque sobre gustos no hay nada escrito (o quizás demasiado).

En este post no voy a decirte lo que es correcto o lo que no, porque todo depende de muchos factores, incluido el público al que vaya dirigido, pero, según mi experiencia como redactora y como lectora, hay una serie de argumentos que podrían ayudarte a decidir si tu entrada debería ser larga o, por el contrario, muy corta.

 

[icon_list_item icon=’fa-hand-o-right’ icon_type=’transparent’ icon_color=’#9e8729′ icon_top_gradient_background_color=” icon_border_color=’undefined’ title=” title_color=” title_size=”] Argumentos a favor del post corto

• La mayoría de la gente no lee, va con prisas y quiere que le demos todo mascadito, por lo que simplemente escanea con la vista y decide si le interesa o no. En este sentido, si tienes la convicción de que tus seguidores no tienen interés por los contenidos escritos, ni por el conocimiento en sí mismo, no pierdas tu tiempo con contenidos muy desarrollados y ve al grano o usa imágenes, infografías, etc. Sin embargo, lo dicho no es una verdad absoluta o es una verdad con muchos matices, porque, si tu lector escanea los puntos claves que tú has resaltado y considera que puede interesarle lo ahí reseñado, se quedará a leerlo. Así pues, no es una simple cuestión de post corto o largo, sino de cómo está redactado tu post. En este sentido, te invito a releer “El superpost”.

 

• Un post largo puede ser resumido sin mayores problemas, por lo que podría ser más adecuado que mostrases la versión resumida y la conviertas en un post corto directamente. Es un argumento que leo bastante por ahí, pero con el que disiento completamente. Por un lado, un resumen no es explicativo; es solo eso: un resumen, una síntesis de un texto con argumentos y explicaciones. Por otro lado, si crees que explicar a tus lectores la razón de tus contenidos es una pérdida de tiempo, ¿para qué escribes el post? Es más, ¿para qué tienes un blog con información que quieres que lean otras personas? ¿Solo por las visitas? ¿Exclusivamente por el dinero que te generan? Hay que respetar un poquito a los lectores y seguidores, así que, sin ánimo de ofender, sería mejor que te dedicases a otra cosa si consideras que tus lectores/clientes no valen tu tiempo.

 

• Un post largo puede cortarse en varios posts cortos, creando una serie de artículos. Esto puede ser muy efectivo en lo que respecta a un post largo con contenido denso y muchos aspectos en los que hay que detenerse para explicar, poner ejemplos, etc. Sin embargo, no siempre es así. Por ejemplo, imagina que quieres explicar la frase “bueno, bonito y barato…”. Podríamos hacer tres posts, uno que hable de qué significa “bueno”, otro para “bonito” y un tercero para “barato”, pero, ¿es necesario? Tú eres quien decide lo complejo que puede ser un tema en función de la cantidad de información que vayas a dar. Si es mucha información y es posible dosificarla en varios posts de la misma serie sin que frustre el objetivo de tu entrada, ¡adelante! Sin embargo, no recortes un post solo porque quieras alargarlo en el tiempo. Ello sería contraproducente, porque el lector se dará cuenta de tu estrategia tarde o temprano y seguramente se sentirá decepcionado.

 

• Un post corto es potencialmente más viral y compartible que uno largo. Esto es así y no tengo nada que objetar, salvo el hecho de que creo que la viralidad no debe ser per se el objetivo de un post. Si se da, bienvenida sea.

 

[icon_list_item icon=’fa-hand-o-right’ icon_type=’transparent’ icon_color=’#9e8729′ icon_top_gradient_background_color=” icon_border_color=’undefined’ title=” title_color=” title_size=”] Argumentos a favor del post largo

• El post largo es más explicativo, da mucha más cantidad de información, así como sirve para profundizar en los temas, lo que puede consolidarte como un experto en la materia, cosa que me parece un objetivo muy importante para un blogger serio. Si es lo que buscas, genial, pero no olvides jamás que un post largo con un contenido flojo es un total aburrimiento para los lectores. Trabaja tu contenido pues es tu carta de presentación.

 

• Un post largo se posiciona mejor que uno corto, siempre que esté bien trabajado (redacción, estructura, palabras claves, etc.). No soy experta en esto, pero parece ser que hay estudios que lo demuestran (voy a profundizar más en saber sobre este particular).

 

• Un post largo hace que tu lector esté más tiempo en tu web/blog, lo que ayuda al posicionamiento y a tu tasa de conversión (interés que se convierte en compra de producto, servicio). El interés del lector puede favorecerte en todo, así que cuida y mima tus posts. No creas que el lector se va a quedar a leer un post interminable y soporífero. Tendrás que ofrecerle mucho a cambio.

 

• Un post largo con contenido interesante y bien trabajado es oro puro, porque atrae enlaces de calidad, lo cual puede mejorar las visitas, el SEO y la rentabilidad o monetización.

Una de las entradas al casco antiguo de la ciudad de Tallin, Estonia.

[icon_list_item icon=’fa-eye’ icon_type=’transparent’ icon_color=’#8a7228′ icon_top_gradient_background_color=” icon_border_color=’undefined’ title=” title_color=” title_size=”] Cuando escribes un artículo, tú eres quien debe saber

• a qué público diriges tus posts (solo quieren ver imágenes, son sesudos y disfrutan analizando datos, etc.)
• si vas a ofrecer mucha o poca información (esto podría ayudar a consolidarte como experto o no)
• si el contenido sobre el que quieres escribir es accesible para todo el mundo o muy especializado
• si el contenido sobre el que quieres escribir admite una partición a fin de no agobiar a tus lectores o, por el contrario, mejor publicar toda la información de un tirón
• si el contenido sobre el que quieres escribir puede ofrecerse bajo los parámetros de una noticia (corta, directa, eficaz)
• etc.

 

[icon_list_item icon=’fa-star-o’ icon_type=’transparent’ icon_color=’#807124′ icon_top_gradient_background_color=” icon_border_color=’undefined’ title=” title_color=” title_size=”] Para concluir…

Tú tienes los datos para decidir cómo quieres que sea tu post: muy corto y efectivo para que tus clientes vuelvan a por más o algo más largos y concienzudos para dejar satisfechos a tus lectores. En cualquier caso, toma las riendas de tus contenidos y dales la longitud adecuada al contenido que quieras ofrecer. No los hagas cortos porque lo diga algún gurú, ni largo para “parecer” un experto. Haz lo que tus contenidos requieran en cada momento. Ni más, ni menos.