Pan de molde de centeno y matalahúva
Estos últimos días he estado bastante panarra, cosa que me encanta para relajarme y desahogarme. Amasar libera tensiones y me deja como una rosa. Y luego, cuando el resultado sale del horno… ¡Qué gusto más grande!
El proceso del pan, al menos en mi caso, comienza con libros monotemáticos por el suelo, sobre la mesa, en la cama, sobre el sofá… Luego no hago nada de lo que veo, pero lo disfruto y aprendo un montonazo. En esta ocasión me apetecía hacer un pan para desayunar, por lo que me decanté por el centeno.
El centeno es un cereal especialmente cultivado en Europa del norte y del este, donde los panes de centeno son mucho más comunes que en nuestro país. Mientras en España y Francia nos decantamos por panes blancos y de harinas excesivamente refinadas, en Suecia y Alemania, por poner un ejemplo, prefieren el
pan negro o
pumpernickel. Una pena, porque
la harina de centeno tiene un menor contenido en gluten que la de trigo y mucha más fibra, lo que hace que este pan esté indicado para quienes sufren de estreñimiento, de diabetes y de colesterol alto.
El pan que yo he preparado no es un pan negro, sino oscuro… No es un pan 100% harina de centeno, sino que es un 50% harina de trigo (de fuerza) y 50% harina de centeno, aderezado con matalahúva, ingrediente muy común en los panes de las Islas Canarias. Quizás porque el anís (matalahúva) ayuda a disipar los gases y ya sabemos que las harinas en general lo producen, especialmente si el proceso de levado ha sido demasiado rápido.
Este pan de centeno con matalahúva se come muy bien. Es ideal para desayunar con jamón, con una buena mermelada casera o con un chorreón de aceite de oliva virgen extra y unas ruedas de tomates con sal. Si prefieres hacerte un sandwich, se presta a ello estupendamente…
Si te preocupa que el pan se ponga duro, haz como yo. Lo he cortado en rebanadas relativamente finas, las he metido esparcidas en una bolsa y las he llevado al congelador. Cuando me levanto por la mañana, saco un par de rebanadas de pan y, mientras me ducho, se descongelan un poco; luego a la tostadora y…¡listo! ¡Como pan recién hecho!
Les deseo una estupenda y productiva primera semana de junio. ¡Sean felices!
Este post incluye publicidad sobre servicios y productos que yo suelo demandar y/o adquirir.
Por favor qué pintaaa!!
que pinta!!! enviame para desayunar!! vaaa!<br />besotes
Adoro el centeno, lo he comido siempre, me gusta porque es denso y puedes cortar esas rebanadas tan perfectas como las tuyas.<br />Te pasaste con tu pan, o como sería en modalidad española, te "saliste".<br />Precioso Lau, con tu mermelada recién hecha ya es lo más.<br />Besos.
Un pan estupendo, yo sigo haciendo algún pan pero estoy muy falta de tiempo y de ganas para las fotos. Besos guapa.
Los panes de centeno me encantan, los panes típicos daneses son mi perdición con miga prieta y sabor intenso.<br />El tuyo se ve riquísimo, en casa también suelo mezclar 50 centeno/50 harina de trigo o de espelta blanca pero nunca le he añadido anís, me lo apunto para el próximo!<br />Y el aspecto…¡precioso!<br />BEsos,<br />Palmira
Yo tambien he tenido el fin de semana panarra pero no acabo de encontrarle el punto. Tengo pendiente un pan de molde para el desayuno. A ver si lo consigo y me aclaro un poco las ideas porque leyendo aquí y allá creo que no tengo las ideas muy claras todavía. Me gusta como te ha quedado…………. me llevo un par de rebanadas virtuales para el desayuno.<br />Bss
Me encanta hacer pan y también actuo como tú ….libros por todas partes ,aprendiendo de todo y de lo que veo y después me salgo con mis ideas ..jejeje .La pinta es fantástica ,besos
Te ha quedado de escándalo. Y me he reído, porque me pasa como a tí, después de mirar mil y cien libros, al final no hago nada. Este pan con sabor a matalahúva me gusta sólo con aceite de oliva, qué rico!!!
Para mí también es una relajación hacer pan :). Es un proceso que me encanta, ya sea con masa madre o sin ella, y sin duda el centeno es de mis cereales favoritos. Yo suelo añadirle melaza para potenciar el tono oscuro y dar más aroma a la miga, pero con matalahúva debe salir riquísimo también! :)<br />Yo hago igual que tú, corto el pan en rebanadas y las congelo; como somos sólo dos en casa así
guardame un cacho q alla q voy a por ello.<br />se ve de autentico vicio<br />saludos
Que rico…suelo hacer pan con harina integral de centeno pero con matalahúva la verdad es que no he hecho nunca, a ver si encuentro y puedo hacer este pan…besitos
Tiene una pinta más que estupenda! Ya lo visualizo tostadito con aceite y zumito de naranja!
Que pasada Laura!!! Me imagino el sabor y se me hace la boca agua!!! Asocio el aroma y el sabor del matalahuva a mi niñez: cuando mi abuela hacia pan de higos y predominaba ese olor… mmmmmm…. Este pan tiene una pintaza!!! Y, tienes toda la razon, hacer pan rebaja los niveles de estres!!! ;-)<br />Un besote
menuda pinta Laura! Una vez hice un pan con centeno y fue un fiasco, aunque el problema es que me quise inventar la receta. Besitos guapa
De pan en pan y tiro porque me toca, jejeje.<br />No se si me gusta más este o el que tienes más abajo…uuumm, cuestión de probar los dos ¿NO?<br />Y veo que ya estás liada con las mermeladas…hay Dios mio y yo a dieta…. <br /><br />Un saludo a mi modelo favorito masculino gastronómico, que es tu chico, claro está, jejeje.<br />Hasta pronto pareja.
Mi Lau hermosa, para mi el centeno es básico! Y los panes rústicos, sabrás que mucho más, densos, con consitencia y mucho, pero que mucho sabor!!<br /><br />Un abrazo.
Nos encantan los panes de centeno, cuanto más oscuros mejor, éste te quedó impresionante, qué rico para desayunar!!<br /><br />un abrazo
Desayuno un pan muy parecido todas las mañanas!!! Me has hecho un gran favor colgando esta receta!! Besos 🙂
Te ha quedado un pan estupendo!! Me encanta el pan con centeno, salen buenísimos!! Besitos guapa!!