Un aroma goloso y, al tiempo, potente inunda mi casa. ¡Cosa rica! Todo es positivo cuando el vino y el chocolate se asoman. Pero cuidado, este plato no es apto para paladares delicados y que solo gustan de sabores suaves, homogéneos y llanos. No, no… Este estofado es para valientes, para celebraciones con deslices hacia la bacanal en las que el vino campa a sus anchas e incluso se desparrama en el mantel cada vez que dos comensales chocan alegremente sus copas. Comida muy sabrosa para condumios abundantes y donde las carcajadas y voces festejan la vida. Siempre hay algo que celebrar y este estofado de ternera con vino y chocolate es pura verbena para los sentidos.
Estofado de ternera con vino y chocolate
[icon_list_item icon=’fa-long-arrow-right’ icon_type=’transparent’ icon_color=” icon_top_gradient_background_color=” icon_border_color=’undefined’ title=” title_color=” title_size=”] INGREDIENTES (para 2-3 personas):
- 400 g de ternera
- 2 zanahorias medianas
- 1 puerro
- 1 cebolla morada
- 700 ml de vino tinto
- 80 g de chocolate negro sin azúcar
- 4-5 ramitas de tomillo fresco
- 2 dientes de ajo pelados y majados
- 1/2 cucharadita de copos de guindilla seca
- sal marina gruesa
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
[icon_list_item icon=’fa-long-arrow-right’ icon_type=’transparent’ icon_color=” icon_top_gradient_background_color=” icon_border_color=’undefined’ title=” title_color=” title_size=”] ELABORACIÓN:
1º) Corta la ternera en tacos de 2-3 cm y dóralos en una cazuela baja con 2 cucharadas de aceite. Hazlo a fuego alto para sellar la carne. Saca la carne y resérvala en un plato.
2º) En la misma cazuela de la carne, sin limpiarla, añade la otra cucharada de aceite. Corta en juliana fina la cebolla y el puerro y añádelos a la cazuela junto con un pellizco de sal y ajo majado. Sofríe un par de minutos y añade la zanahoria cortada en ruedas. Cocina unos 3 minutos más.
3º) Incorpora la carne a las verduras, junto con las ramas de tomillo y los copos de guindilla. Rehoga un par de minutos.
4º) Añade el chocolate troceado a la cazuela y remueve hasta que se funda, cuidando de que envuelva la carne y las verduras, pero no se queme. Vierte el vino y otro pellizco de sal. Mezcla bien todo. Sube el fuego 2 minutos para que evaporar el alcohol del vino.
5º) Tapa la cazuela y deja que se estofe bien la carne durante unos 85-90 minutos a fuego medio, hasta que la salsa reduzca y la carne esté tierna y jugosa.
6º) Rectifica de sal si hiciera falta.
A tener en cuenta:
- ¿Qué carne usar? Yo prefiero el morcillo, por la gelatina que tiene y hace que los guisos y estofados sean más sabrosos y la carne esté muy tierna. Sin embargo, en ocasiones, mi carnicero me ha recomendado alguna pieza de tortuguita (lagarto, creo que también se llama) y me ha quedado muy buena y tierna. Si tú prefieres otros cortes, úsalos.
- ¿Qué clase de vino tinto? Un buen vino, un vino que te guste para beber, sin ser un vino caro. Yo usé Zelán, un tinto roble Ribera del Duero que me gusta muchísimo y está muy bien de precio. Ten en cuenta que el vino en este guiso es protagonista y enfatiza el sabor de la carne y del chocolate, así que debe ser un vino a tu gusto. Si no te gustan los vinos fuertes, no uses uno, porque entonces no te gustará el guiso.
- En cuanto al chocolate, no uses un chocolate con leche, ni con azúcar, porque no tienen sentido en esta receta. Se trata de ensalzar el sabor de la ternera, no de comer un plato dulce como si fuera un postre. Este estofado es una comida consistente y de sabor y aroma increíbles. Si crees que no te va a gustar porque no te gusta el chocolate negro y sin azúcar, es que este no es una receta para ti. Tampoco pasa nada.
- Cuando la salsa ha reducido y la ternera se ha convertido en un bocado tierno, tu casa tendrá un maravilloso aroma a chocolate, pero notarás también muchos otros matices acaramelados y especiados que habrá aportado el vino que hayas usado. Por eso es tan necesario que el vino que emplees sea un vino que te guste.
- Puedes servirlo con un arroz basmati, unas papas sanchochadas (cocidas o guisadas), una polenta a la plancha (como hizo Nicola Poltronieri en la receta que me ha servido de inspiración) o, como hice yo, con un buen pan de campo para mojar en la salsa.
- Sobra decir que deberías acompañar este guiso del mismo vino que añadiste a la receta. Sé que soy un poco petarda con estas cosas, pero comer este guiso bebiendo refresco me parece un acto del crimen organizado. Entiendo que hay personas a quienes no les gusta el vino, pero entiendo también que, entonces, tampoco les gusta este plato. Puro sentido común y coherencia, digo yo.
- Tal y como he dicho anteriormente, para hacer esta receta me basé en una que vi preparar al chef italiano (que parece que se ha moderado últimamente con las tonterías y poses que solía hacer en su programa de Canal Cocina) Nicola Poltronieri. Yo he hecho la receta siguiendo un proceso ligeramente distinto del suyo y la he adaptado a mi propio gusto personal, así como he acentuado el sabor a chocolate, añadiendo unas onzas más y he introducido una hierba fresca que creo que va genial con el vino y el chocolate: el tomillo.
Espero que te animes a hacer esta receta, la adaptes a tus inclinaciones personales y me cuentes el resultado si te apetece.
¡Que bueno! No suelo cocinar con chocolate platos salados, pero me has recordado unas codornices que hizo una Navidad hace muchos años mi madre, con chocolate, que estaban de cine. Creo que sacó la receta de un libro.
Besos.
Pintaza que tiene!!Yo ya he prepararado para alguna navidad esa combinacion de vino y chocolate…un acierto total.Tu plato parece facilisimo.Le he perdido la pista a Nicola pero me alegra que te gusta un poco mas…jejeje!!!!!Besos!!!
Pues ¡que curiosidad más grande me ha entrado, Laura!. Esto seguro que me rondará la cabeza hasta que termine haciéndolo. Y qué buena manera de empezar la semana. Un abrazo.
No hay nada más rico cuando hace frío fuera… sentarse en la mesa con un rico guiso de vino ligado con chocolate como se hace en casa desde siempre :o)
Qué bueno, ahora mismo me tomaría un plato!
Besos y feliz semana,
Es costumbre en tu casa hacerlo, Palmira? Cuéntame las particularidades de tu receta. Me interesa mucho.
🙂
Uy qué buena idea Laura, un guiso con chocolate…lo probaré pronto que tengo mucha curiosidad!
Besos y feliz semana
Está riquísimo, Ana. Contundente, muy sabroso y para tomar con un buen vino y bastante pan. 😉
Besitos
Que rico, me encanta y casualidades, fue mi comida del domingo con chocolate incluido, eso si la próxima vez probaré tu toque de guindilla, me da que me gustara. Besos.
El chocolate y la guindilla se llevan estupendamente, tocaya. Más de lo que la gente cree.
Besitossssssssss
Hola guapísima !!!
La primera vez que vi el chocolate en una receta de carne, fue hace mil años en el programa de la recién fallecida Elena Santonja, y desde entonces me quedó esa cosa de probarlo alguna vez. Y mira tú por donde llegas tú con esta maravilla de guisote que le levanta el ánimo al más pintado.
Ahora te digo una cosa, no bebo vino nunca, soy de agua cual rana o cerveza bien fría ocasional, pero a mis guisos les doy alegría con vinitos de categoria ¿que es eso de ponerles vino de tetra brick? siempre digo que lo que no te gustaría beber, no lo has de utilizar para comer.
Y tu guiso de viene conmigo, que me has dejado babeando y esto no lo tardaré en hacer.
Besotes mi niña, feliz semana.
jajajajajajaja Si lo pruebas, me cuenta. Ya te digo que no sabe ni a vino, sino que adquiere los aromas del fondo del vino. De verdad que está muy bueno y es un plato contundente.
Muacccccccccc
Mi chico es de los que sostienen que el chocolate en los platos salados no queda bien… yo discrepo y mucho, sólo hay que saber elegir el chocolate adecuado, y no plantar un chocolate con leche (horror!) baratero (horror al cubo!). Ni más, ni menos.
Coincido contigo. El chocolate queda bien en todo, pero hay que saber integrarlo en el plato. Añadir un buen chocolate es esencial, al igual que la cantidad que va con cada producto. El vino, además, redondea el plato.
Gracias por pasarte, Ana. 🙂
Simplemente me encanta y este en cuanto vuelva del viaje cae seguro, soy mucho de estofados en esta época y con chocolate nuca lo he comido, así que apuntado queda.
Regado con un buen vino tanto por dentro como por fuera debe ser una gozada.
Un besote preciosa
Ya me cuentas si lo haces, Mercedes. Ten un buen pan al lado. 🙂