No sé. Me hablas y no sé.
Me miras y no entiendo nada.
Sonidos huecos salen de tu boca
de uno en uno y a la vez.
Que me quieres, eso dices.
Me abrazas y me besas,
me das todo lo que tienes.
¡Qué seres tan felices!
Una chispa prende tu mirada.
La veo. Se me encoge el pecho.
El aire se esfuma de mi cuerpo,
me encojo. Mi alma ajada.
No sé. Me hablas y no sé.
Me miras y no entiendo nada.
Tus manos rojas con mil perdones.
Muerta en vida. Otra vez.
Poema original escrito por Laube Leal.
Todos los derechos reservados.
Qué duro y que real a la vez, es muy triste que hayan tantas muertas en vida que un día vieron amor en esas manos rojas.
Me voy triste, se lo que es.
Un beso
No quería ponerte triste, Mercedes. Quería revindicar menos amor cursi con el día de los enamorados y más respeto a nosotras, las mujeres.
Espero que, aunque sepas lo que es esta agonía de la que hablo, hayas podido recomenzar con más fuerza. Yo tengo esa visión de ti: sensible y de corazón grande, pero una mujer que sabe volver a empezar.
Un abrazo, de corazón a corazón.